Planificación urbana y bienestar territorial: académico USS participa en diagnóstico para la nueva PNDU
Carlos Aguirre, académico de la Escuela de Arquitectura, fue uno de los expertos invitados a comentar el diagnóstico que orientará la actualización de la Política Nacional de Desarrollo Urbano 2025–2035.
María José Marconi J., Vicerrectoría de Investigación y Doctorados USS.

A diez años de la entrada en vigencia de la primera Política Nacional de Desarrollo Urbano (PNDU), el Consejo Nacional de Desarrollo Territorial presentó un diagnóstico integral que evalúa su implementación y propone orientaciones para su próxima actualización. El documento, titulado “Reconocer lo avanzado, responder a lo que viene”, fue lanzado este 15 de julio en un encuentro que reunió a autoridades, especialistas y representantes de la sociedad civil.
Uno de los expertos invitados a comentar el diagnóstico fue el Dr. Carlos Aguirre, académico de la Escuela de Arquitectura de la Universidad San Sebastián, consejero individual del Consejo de Políticas de Infraestructura e investigador en temas de planificación urbana. Su intervención abordó temas de planificación territorial, desarrollo económico y humano, y los cambios recientes en los instrumentos urbanos en Chile.
La evaluación de esta política es especialmente significativa, porque fue la primera en ser construida por un cúmulo de actores desde el 2012 al 2014, tras varios intentos fallidos en las décadas previas”, detalla el Dr. Aguirre, quien participa desde 2023 en el proceso de actualización como integrante de los comités técnicos de vivienda e infraestructura.
Planificación urbana y desarrollo humano
En su presentación, el académico analizó los principales cambios que ha vivido el país desde la formulación de la PNDU en 2014, un periodo marcado por alta volatilidad económica, desigualdades territoriales crecientes y transformaciones profundas en las dinámicas urbanas. A pesar de la alta cobertura de instrumentos de planificación (como los planes reguladores comunales), advirtió sobre su desactualización, limitaciones de su implementación y escasa capacidad para responder a los procesos reales de crecimiento urbano.
El académico enfatizó también la proliferación de asentamientos informales, el crecimiento desordenado de ciudades intermedias y el uso extensivo de suelo rural para fines urbanos, fenómenos que reflejan una desconexión persistente entre planificación, inversión pública y desarrollo local. “Repensar la planificación implica dejar atrás su carácter exclusivamente técnico y asumirla como una herramienta de política pública, capaz de articular coherentemente las decisiones de inversión, los instrumentos normativos y las aspiraciones de bienestar de las comunidades”.

Dr. Carlos Aguirre (al centro) en el lanzamiento del diagnóstico para actualización de la Política Nacional de Desarrollo Urbano (PNDU), realizado en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile.
Desde esta perspectiva, planteó la necesidad de fortalecer la articulación entre desarrollo económico y humano, con un enfoque que reconozca las desigualdades estructurales, territoriales y de género. Destacó la importancia de considerar factores como el envejecimiento de la población, el impacto de la automatización y la inteligencia artificial en el empleo, y el déficit de políticas de cuidado como parte del debate urbano.
El entorno urbano no puede entenderse solo en términos de acceso. También debe contribuir al bienestar, la equidad y la calidad de vida”, señala. En ese sentido, propone avanzar hacia enfoques que reconozcan la diversidad territorial, fortalezcan la participación ciudadana y orienten la planificación hacia la inclusión, la sostenibilidad y la cohesión social.
El diagnóstico presentado por el Consejo será la base para la elaboración de la nueva Política Nacional de Desarrollo Urbano 2025–2035, en un proceso que busca recoger aprendizajes del ciclo anterior y responder a los desafíos de un país más diverso, urbanizado y marcado por transformaciones estructurales. Desde su experiencia técnica y académica, el Dr. Aguirre ha contribuido activamente a esta reflexión, apostando por una visión integradora del desarrollo urbano, donde la planificación se alinee con las capacidades, derechos y necesidades de las personas en sus territorios.